Las vacunas

A la hora de viajar a cualquier destino lo primero que tienes que hacer es informarte de las vacunas y posibles enfermedades que puedes coger, sobre todo teniendo en cuenta que el viaje no es a Albacete.

Para ello, a parte de buscar en Internet, llamamos al Centro de Vacunación Internacional para que nos dieran toda la información.

Las vacunas que tienes que ponerte dependen de la duración del viaje y de los lugares que vayas a visitar, por eso recomendamos que una vez que tengáis claro el itinerario que seguiréis, llaméis al centro de vacunación para que os informen y os den cita para poneros las vacunas.

En nuestro caso las vacunas que nos tenemos que poner son:

• En el Centro de Vacunación Internacional:
- Fiebres tifoideas (3 pastillas o 1 pinchazo)
- Tétanos y Difteria (1 pinchazo)

• En la Seguridad Social:
- Hepatitis A (1 pinchazo y a los 6 meses otro de refuerzo)
- Hepatitis B (3 pinchazos: Ciclo normal en 6 meses, ciclo rápido en 2 meses, ciclo super rápido en 1 mes)

A parte de eso hay que tomarse la profilaxis contra la malaria. De la que hablaré más adelante.

Y ahora, aunque no soy médico, voy a poner alguna información recopilada de Internet de las enfermedades contra las que nos vamos a enfrentar:

Fiebres tifoideas: Aunque alguno pueda pensar que la fiebre tifoidea, es aquella que tienen los seguidores de la selección italiana de fútbol, pues no, no es eso. Básicamente es una enfermedad infecciosa producida por algunos serotipos de Salmonella enterica, como Typhi o bacilo de Eberth, y raramente Paratyphi A, B y C. Su reservorio es el hombre, y el mecanismo de contagio es fecal-oral, a través de agua y alimentos contaminados con deyecciones. Ahí queda eso… Para que lo entendamos el resto de los mortales, es un germen que entra en el cuerpo vía digestiva y pasa directamente a la sangre. El principal síntoma es fiebre alta, entre 39º y 40º, cefalgia, ulceras en el paladar, diarrea… Vamos, que es mejor vacunarse.

Tétanos: Esta enfermedad es más conocida por todos, pero no por ello menos peligrosa. De hecho suele ser mortal. Se trata de una neurotóxina que penetra en las fibras nerviosas a través de un corte generalmente por clavos, anzuelos, hierros, etc. Los síntomas: rigidez en los músculos de la mandíbula seguido de rigidez en el cuello y espalda, dificultad para tragar y rigidez muscular en el abdomen pudiendo llegar a producir espasmos y dificultad para respirar, hipertensión severa, taquicardia, fiebre y sudores excesivos. Pero con una buena vacuna para prevenir, solucionado. A parte de eso, en caso de corte es recomendable limpiar bien la herida, quitar el tejido muerto, desinfectar y dejarla al aire ya que el oxigeno mata la bacteria.

Difteria: Es una enfermedad infecciosa producida por una exotoxina que usualmente afecta las amígdalas, garganta, nariz, miocardio, fibras nerviosas o piel. Se transmite por medio del contacto directo por estornudos, garganta, piel, ojos o cualquier otro tipo de secreción de las personas infectadas. Existen dos tipos de difteria: una en la nariz y la garganta, y otra en la piel. Los síntoma principales son el dolor de garganta, aumento leve de la temperatura corporal y ganglios linfáticos inflamados en el cuello. Las lesiones de la piel pueden ser dolorosas, de aspecto hinchado y enrojecido. Desde luego, es mejor un pinchacito y ahorrarse todo esto.

Hepatitis: Es una enfermedad inflamatoria que afecta al hígado. Las dos variedades de las que hay riesgo en los sitios a visitar son:

- Hepatitis A: Se transmite por el contacto con deposiciones de otro enfermo, por falta de higiene en el hogar o bien el consumo de alimentos contaminados y deficientemente lavados (como verduras regadas con aguas no tratadas o en contacto con agentes trasmisores, como moscas o cucarachas). Puede afectar a cualquier persona y tener carácter epidémico en aquellos lugares que no cuenten con tratamiento adecuado de sus aguas servidas.

- Hepatitis B: se transmite por la sangre o por vía sexual desde un enfermo con hepatitis activa o de un portador sano del virus de la hepatitis B (VHB). Puede causar una infección aguda y persistir en la sangre toda la vida, causando cirrosis (cicatrización) del hígado, cáncer del hígado, insuficiencia hepática y la muerte.

Y si esto os ha parecido poco ahora vamos con la chunga, al no tener vacuna…

Malaria: También se conoce por el nombre de paludismo. Es una enfermedad provocada por un parásito que trasmite la hembra del Anopheles, un mosquito que vive en las zonas tropicales de Asia, África y América. Este mosquito suele aparecer a partir de la puesta del sol, así que una buena forma de evitar la enfermedad es utilizar repelentes de mosquito y llevar manga larga, aunque haga calor, para evitar la picadura. Los síntomas se suelen confundir con los de la gripe, ya que la enfermedad provoca un estado febril con fiebres altas y deja exhausto al organismo (esto es debido a que se destruyen los glóbulos rojos). Si se coge la enfermedad a tiempo tiene cura, pero es importante que no se confunda con gripe, ya que se manifiesta entre 8 y 30 días después de la picadura. Así que si alguien ha regresado ya de zona de riesgo y coge lo que parece una gripe, que vaya inmediatamente al médico y le informe que ha estado en dicha zona, ya que con solo un análisis de sangre se detecta.

La malaria es una enfermedad que desgraciadamente no tiene vacuna, pero esto no quiere decir que la vayas a coger sin remedio. Para evitar cogerla existe la profilaxis, que son unas pastillas que tienes que tomar 1 cada día con el siguiente ciclo: 1 días antes de entrar en zona de riesgo, durante el tiempo que estés en dicha zona y una semana después de salir de la zona de riesgo. Las pastillas son prácticamente efectivas al 100% contra la malaria (pero no son el 100%, por eso es importante evitar la picadura del mosquito). Lo malo de las pastillas es que valen una pasta. Según tengo entendido una caja con 12 pastillas cuesta 55 euros!!! Así que si echamos cuentas: 1 día antes + 10 de zona de riesgo + 7 de vuelta = 18 pastillas, que hacen 3 cajas entre Susana y yo, y en total 165€ (será desgraciado el Anopheles!!!). Eso sí, aunque sea una pasta, el mejor dinero invertido es en salud, así que si no queréis sorpresas, ya sabéis.

También comentar que hay que pagar la vacuna de la Hepatitis A (aunque te la pongan en la Seguridad Social no te la recetan) que son 27,77€ y la de las fiebres tifoideas que son 17€.

Los datos de contacto del Centro de Vacunación Internacional en Madrid:

C/ Francisco Silvela nº57 planta baja
Teléfono para cita previa : 902 02 73 73 (en horario de 9 a 18 horas de lunes a viernes)

Recomendamos visitar las siguientes páginas para tener más información:

• Ministerios de Asuntos Exteriores
• Ministerios de Sanidad y Consumo
• Organización Mundial de la Salud
• Viajar Sano

Lo mejor de todo es que ahora voy a estar vacunado y seré inmune a un montón de enfermedades chungas ¡¡y vosotros no!! jeje

Y para concluir, una pequeña anécdota de nuestra visita al Centro de Vacunación Internacional. No se por qué motivo vamos pensando que el centro de vacunación es en el número 7 en vez del 57. Al llegar allí es un edificio que no tiene pinta de ser lo que buscamos, así que preguntamos y unas señoras nos mandan dos calles más allá, a la calle Montesa. En esa calle, hay un centro que es el Servicio de Prevención y Promoción de la salud y parece ser que ponen algunas clases de vacunas. Cuando decimos que tenemos cita y que queremos vacunarnos para ir a China, nos dicen que vale y que nos van a poner la vacuna de la rabia.

- Umm... ¿de la rabia? - contesto - Pero si esa no nos la teníamos que poner; nos faltaba la del tétanos y fiebres tifoideas.... umm... ¿ustedes no estaban en el número 7 de Francisco Silvela?

- No, esos son otros. Pero están en el 57 no en el 7.

- Upps... mejor nos vamos al 57...

¡¡¡Si nos perdemos en Madrid, no quiero ni pensar lo que pasará en China!!! Y lo peor de todo es que si nos descuidamos nos vacunan de otra cosa.